PRADERAS SUBMARINAS

Rut Hernández Toledo
ZOSTERA NOLTII, UNA RAREZA EN NUESTRAS COSTAS

No todos los vegetales del mar son algas. Algunas especies de plantas superiores, con capacidad para producir flores y frutos como sucede en los ecosistemas terrestres, han conseguido colonizar zonas acuícolas, lagos, ríos, y los fondos marinos de las aguas costeras en todos los océanos del mundo. 

Estas fanerógamas marinas forman extensas praderas sumergidas. La productividad de estas formaciones es altísima, hasta el punto de ser consideradas diez veces más valiosas que los bosques tropicales, pudiendo superar económicamente los 14.500€ por hectárea. Las diversas capacidades desarrolladas para vivir totalmente sumergidas, tales como tolerancia a la salinidad marina, un sistema eficaz de anclaje al sustrato arenoso y un polen filamentoso, les han permitido colonizar con éxito los fondos sedimentarios desprovistos de vegetación.

Estos ecosistemas cumplen diversas funciones ecológicas, estructurales y energéticas de suma importancia. Son capaces de fijar enormes cantidades de sedimentos protegiendo las costas frente a la erosión de las olas, consolidando y estabilizando el sustrato e impidiendo desprendimientos, al igual que son campaces de generar grandes cantidades de materia orgánica, traducible en una alta productividad primaria y, en términos de biomasa, de interés pesquero.
Otra peculiaridad de estas formaciones, es la de prestar un enorme servicio a la biodiversidad marina, al favorecer la formación de hábitats y paisajes, dando cobijo a cientos de especies diferentes de peces, crustáceos, moluscos, etc, lo que las convierte en objeto de protección, y cuidado, pues actúan como auténticas guarderías de los estadíos alevines y juveniles de todas las especies anteriormente citadas.

En la UE, existen 5 especies de fanerógamas marinas formando praderas sumergidas: Posidonia oceánica, Cymodocea nodosa, Zostera marina, Zostera noltii y Halophila decipiens.
En el litoral canario se encuentran 3 de ellas. La Cymodosea nodosa, conocida como hierba del caballito de mar, localizándose en todas las islas del Archipiélago. Crece, generalmente, en fondos lodosos y arenosos y en ocasiones se les asocian, algas del género Caulerpa. La Halophila decipiens, sólo es conocida en Europa, por su presencia en el archipiélago canario, pero su distribución es pantropical. En Canarias, forma densos tapices en el sublitoral, encontrándose en todas las islas exepto en Fuerteventura y Lanzarote. Y la Zostera noltii, se distribuye preferentemente en aguas someras y se localiza en Canarias, únicamente, en el litoral de Arrecife, Lanzarote, confirmándose su presencia en 1987 por Alfonso-Carrillo y Gil-Rodríguez.

A principio de los 80, las praderas de Zostera noltii en el litoral de Arrecife, eran densas, y cumplían una labor ecológica importante, pues eran el sustento y el cobijo de múltiples especies, tanto animales, como vegetales, que vivían entre sus haces epífitamente sobre los mismos. La densidad de estas praderas, con el paso de los años y las sucesivas transformaciones sufridas por el Municipio, fue haciéndose cada vez menor, hasta el punto de que la reducción fue tan drástica, que prácticamente, llegó a desaparecer en el año 2000, fecha en la que se tuvo que incluir esta planta marina en el Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias (BOC 2001/097) en la categría de “Peligro de Extinción”.

No existen informes definitivos pero en las últimas publicaciones sobre los estudios más recientes del 2005, tanto desde el Departamento de Biología Vegetal y Biología Animal (Biología Marina), de la Universidad de la Laguna, como desde el SEMALL, apuntan a que las posibles causas de la práctica extinción de la fanerógama marina tuvieron que ver con varias ciruntancias, que podemos resumir en: pérdida natural de la hidrología de la zona y deposiciones de vertidos contaminantes de diversa naturaleza.
En el 2004 fueron localizadas unas pocas praderas de esta especie, de densidad muy laxa. Tras los primeros análisis se pudo constatar la recuperación de Zostera noltii, pero se mantiene el grado de protección, pues quedan pendientes múltiples estudios que ayuden a valorar el estado real de estas incipientes formaciones y la capacidad de recuperación de las mismas.

Rut María Hernández ToledoLic. Biología Marina

 

Referencias bibliográficas:
Estudio Preliminar de las poblaciones de Zostera noltii en Lanzarote, Islas Canarias. Naroa Aldanondo-Aristizabal, Jacinto Barquiín Díez & Mª Candelaria Gil-Rodríguez. 2005.
Parámetros de Interés Medioambiental en las praderas de Zostera noltii de Lanzarote, Islas Canarias. Naroa Aldanondo-Aristizabal, Venerando González, MªCandelaria Gil-Rodríguez & Jacinto Barquín Díez 2005.
Flora y Vegetación marina de Arrecife de Lanzarote. Islas Canarias. Guadalupe González, M.E.,Gil-Rodríguez & M.C. Hernández-González. 1995.
Recuperación de Patrimonio Natural. Praderas Sumergidas. Oceana y Fundación Santander Central Hispano.