Jan Siewert

“Concierto_en_Vela”

Se apagaron las luces y comenzó la magia. Desde una pequeña barca, en medio del Charco de San Ginés, sólo se sentía la mirada expectante de las más de tres mil personas que fijaban su atención en un objetivo común. Desde ahí, sólo el arrullo suave de las ondas del mar casi hacía adormecerse. Desde ahí, el tintineo de cientos de luces que adornaban la bahía. Desde ahí, la primera nota musical surgida de un instrumento de cuerda. Se enciende un foco y se dibuja la silueta mágica de una orquesta, como surgida del agua. Realmente esa noche todo se paró; todo menos la música y el mar.